Las plantas de tratamiento de efluentes suelen estar formadas por un conjunto de operaciones unitarias que logran la depuración del líquido ingresante. En la mayoría de las plantas, se requiere el suministro de aire comprimido para garantizar la correcta oxigenación de las bacterias depuradoras en la cámara de aireación. Para este fin, se utilizan equipos denominados soplantes que ejecutan esta tarea a la perfección.

En el ámbito industrial, la selección del equipo adecuado es esencial para optimizar procesos y garantizar la eficiencia operativa. Es importante considerar que el soplante es el equipo que suele consumir mayor potencia eléctrica por gran diferencia con respecto a los demás. En este artículo técnico, exploraremos dos tecnologías prominentes en el mundo de la generación de aire comprimido: los soplantes regenerativos y los trilobulares. Se descubrirán sus diferencias fundamentales y cómo cada uno se destaca en aplicaciones específicas.

Los soplantes regenerativos, también conocidos como soplantes de canal lateral, han ganado popularidad por su bajo coste. Estos dispositivos utilizan un diseño de rotor de múltiples etapas para comprimir el aire, minimizando las pérdidas de presión interna. Su capacidad para generar presiones moderadas o bajas con altos caudales los convierte en elección frecuente en aplicaciones que requieren un suministro constante de aire.

Esquema de un soplante regenerativo

Los soplantes trilobulares, por otro lado, destacan por su diseño de tres lóbulos, que ofrece un rendimiento excepcional en términos de presión y capacidad de succión. Este diseño único minimiza las pulsaciones de flujo de aire, proporcionando un flujo continuo y estable. Los soplantes trilobulares son ideales para aplicaciones que requieren presiones más altas y son conocidos por su resistencia a condiciones adversas. Su coste es un tanto más elevado, pero la eficiencia de aireación es muy alta y generan una gran transferencia de oxígeno para mantener a las bacterias de la cámara de aireación en las condiciones óptimas para su desarrollo.

Se analizarán las diferencias entre los soplantes regenerativos y los soplantes trilobulares considerando los siguientes aspectos:

  • Eficiencia energética y aireación
  • Contrapresión aceptada
  • Mantenimiento
  • Costos

Eficiencia energética y aireación

Con respecto a la eficiencia energética, los soplantes regenerativos suelen ser eficientes en términos energéticos para aplicaciones que requieren un flujo constante de aire a baja presión.

En cambio, los soplantes trilobulares pueden garantizar también grandes eficiencias, pero con una versatilidad mayor. Además, este tipo de soplante es conocido por proporcionar un flujo de aire más uniforme y tener menos pulsaciones que los soplantes regenerativos. La forma trilobular de los rotores puede proporcionar un flujo de aire más uniforme y reducir las pulsaciones, lo que puede ser beneficioso en aplicaciones donde se necesita un suministro de aire constante a una mayor presión.

La eficiencia puede variar según la aplicación y las condiciones específicas de operación. En general, ambos tipos de soplantes pueden ser eficientes, pero la elección depende de los requisitos precisos de la aplicación. La contrapresión es un factor fundamental a la hora de la selección del equipo.

Contrapresión aceptada

En general, los soplantes regenerativos no oxigenan de manera correcta la cámara de aireación cuando se tiene una profundidad mayor a 2,25 metros aproximadamente de columna de agua. Esta es una gran desventaja de este tipo de soplantes, que, si bien son más económicos, no cumplen de manera correcta su función y pueden terminar generando inconvenientes operativos en la cámara de aireación y salidas fuera de especificación. Además, pueden aparecer subproductos relacionados con metabolismos anaeróbicos que suelen ser bastante problemáticos tales como el sulfuro de hidrógeno y demás.

Los soplantes trilobulares son conocidos por su alta eficiencia en términos de entrega de aire comprimido. Estos dispositivos generan presión y caudal de manera eficiente para columnas de agua bastante mayores a 2,25 metros. Incluso, pueden tolerar alturas de cámara de aireación de hasta 7 metros de altura con un correcto diseño del soplador.

El rendimiento de aireación que puede alcanzar un soplante trilobular es bastante superior en comparación con algunos soplantes regenerativos cuando se trata una columna de agua mayor a 2,25 metros.

Mantenimiento

El mantenimiento en los soplantes regenerativos suele ser bastante frecuente y se requiere un esquema de mantenimiento preventivo para aumentar la durabilidad del equipo. Es muy necesario realizar con frecuencia tareas relacionadas con la limpieza del filtro de entrada. Los soplantes de este estilo suelen contar con un filtro de entrada para evitar que partículas sólidas ingresen al sistema. La limpieza regular de este filtro es esencial para mantener el rendimiento (caso contrario, este disminuye) y prevenir obstrucciones.

Por otro lado, también es importante realizar una inspección recurrente de juntas y sellos. Estos deben ser inspeccionados periódicamente para asegurar que no haya fugas de aire, relacionadas directamente con pérdida de eficiencia.

Suele ser bastante mayor el mantenimiento que requieren este tipo de soplantes en comparación a la que requieren los soplantes trilobulares y la eficiencia puede disminuir mucho en caso de no hacerse. Por lo tanto, se requiere especial atención durante la operación y se debe establecer un plan estricto de mantenimiento preventivo que normalmente suele ser un poco complejo de adoptar.

En cambio, los soplantes trilobulares requieren mucho menor mantenimiento y funcionan por un tiempo más prolongado sin inconvenientes.

Costos

En cuanto a costos, en general, suele encontrarse mejor posicionado el soplante regenerativo. El diseño es más económico, por lo tanto, el precio final del equipo suele ser inferior al que se encuentra para soplantes trilobulares. Sin embargo, es importante tener en cuenta la robustez que tiene este último equipo para ciertas aplicaciones y también la durabilidad.

Esquema de un soplante trilobular

En conclusión, la elección entre un soplante trilobular y un soplante regenerativo dependerá de los requisitos específicos de la aplicación. En algunos casos, donde se prioriza la eficiencia y se puede invertir más inicialmente, el soplante trilobular puede ser la elección preferida. Sin embargo, para aplicaciones con requisitos menos exigentes, un soplante regenerativo puede ser una opción más económica y adecuada.

En Bioingepro somos especialistas en el diseño, fabricación y operación de plantas de tratamiento de efluentes y plantas potabilizadoras de agua. En nuestros diseños incluimos la selección del soplante óptimo. Contamos con amplia experiencia y estamos disponibles para asesorarlos. En caso de requerir mayor información o necesitar un presupuesto, no dude en consultarnos.

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