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¿Cómo se potabiliza el agua?
El agua en su medio natural suele contener ciertas sustancias que son indeseadas para las personas, ya sea porque le otorgan mal sabor, porque pueden generar infecciones o porque pueden ser tóxicas. Por todos estos motivos, el agua debe potabilizarse para garantizar inocuidad y seguridad al consumirla.
Para que el agua llegue de su fuente natural hasta nuestros hogares, generalmente pasa por cuatro grandes etapas, las cuales describiremos a continuación.
Etapas del proceso de potabilización del Agua
Toma de agua
Se trata de un sistema cuya finalidad es bombear agua desde un río, lago, embalse, acuífero subterráneo o incluso del mar. Salvo en el caso de agua subterránea, las tomas de agua suelen incluir un sistema de retención de sólidos, para evitar que ingresen a las bombas elementos como ramas, residuos o peces. El agua es bombeada e impulsada desde este punto hasta la ubicación de la planta potabilizadora de agua. En este punto, todavía no es apta para consumo.
Planta potabilizadora de agua
Se trata de la instalación donde se produce en sí la potabilización del agua, eliminando paso a paso los diferentes elementos indeseados, hasta lograr un líquido cristalino y apto para consumo. Habitualmente, los parámetros que se eliminan de forma principal son: turbiedad (sedimentos, tierra, arena, etc.), metales tóxicos (por ej., arsénico), metales que otorgan sabor o color indeseado (hierro, manganeso), microorganismos (bacterias y virus). Los procesos específicos dependen del lugar desde donde se tome el agua, pero suelen incluir etapas de desarenado, coagulación, floculación y sedimentación, filtración y desinfección. De esta forma, el agua ingresa turbia, con impurezas, sustancias potencialmente tóxicas y microorganismos, y sale limpia y apta para su consumo.
Cabe destacar que, en el caso del agua de mar, los procesos son bastante diferentes, ya que para eliminar la sal es necesario incluir procesos especiales, como lo son la ultrafiltración y la ósmosis inversa.
El agua potabilizada debe cumplir con una serie de requisitos y parámetros, los cuales están establecidos, en nuestro país, en el Código Alimentario Argentino.
Para conocer más sobre los procesos y el funcionamiento específico de una planta potabilizadora, hacer click aquí.
Cisterna o tanque de almacenamiento
Una vez que el agua se encuentra limpia y lista para ser distribuida, generalmente se almacena en una cisterna, que puede ser elevada o enterrada. En caso de falta de energía eléctrica, la cisterna tiene la capacidad de almacenar el agua que requiere la población durante algunas horas, evitando desabastecimientos incluso en casos de emergencia. Asimismo, en esta cisterna suele incorporarse una pequeña cantidad de cloro, que permite garantizar que el agua está desinfectada incluso cuando atraviesa todas las cañerías que unen la planta potabilizadora con la canilla desde donde la tomamos.
Red de distribución de agua potable
Por último, el agua limpia se distribuye a los usuarios finales (hogares, escuelas, etc.). Esto se logra a través de una red de cañerías subterráneas, que pueden incluir desde grandes acueductos, hasta pequeñas cañerías hasta las canillas de nuestras cocinas, baños o lavaderos. Como punto intermedio, es habitual que las casas tengan su propio tanque de almacenamiento de agua que, de forma similar a la cisterna municipal, permite contener un cierto volumen para que esté disponible de agua en casos de contingencia. Es importante realizar limpiezas periódicas de estos tanques para garantizar que el agua que consumimos sea sana y no existan riesgos de contaminación.
En Bioingepro somos especialistas en el diseño, fabricación y operación de plantas potabilizadoras de agua y plantas de tratamiento de efluentes.Contamos con amplia experiencia y estamos disponibles para asesorarlos. En caso de requerir mayor información o necesitar un presupuesto, no dude en consultarnos.
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